El museo (Museum Blindenwerkstatt Otto Weidt) cuenta la historia del taller para ciegos Otto Weidt. En un patio de Hackesche Höfe, el fabricante a pequeña escala Otto Weidt se encargaba principalmente de judíos ciegos y sordos durante la Segunda Guerra Mundial. También fabricaba escobas y cepillos para el Ejército alemán del 1921 1 1945, por lo que su empresa fue clasificada como "importante para el servicio militar". Las diferentes biografías narraban los intentos de Otto Weidt por proteger a sus trabajadores judíos de la deportación y persecución. Les daba documentos de identificación falsificados y alimentos y sobornó varias veces a los oficiales de la Gestapo. Dado que el riesgo era cada vez mayor, buscó escondite para algunos. Uno de estos judíos fue encontrado en las salas del museo actual. Las salas siguen manteniendo el diseño del momento. La exposición describe la situación de riesgo de los judíos que todavía vivían en Alemania con fotografías, cartas y otra documentación, y centros mediáticos. Al mismo tiempo, recuerda a los "héroes pacíficos" que arriesgaron su vida para ayudarles.