En 1825, Federico Guillermo III compró los terrenos (Schloss und Park Charlottenhof) situados al suroeste del antiguo parque de Sanssouci como regalo para los príncipes herederos Federico Guillermo IV y Elisabeth de Baviera. Karl Friedrich Schinkel convirtió la casa solariega existente en una residencia de verano al estilo de una villa neoclásica entre 1826 y 1829. Él mismo diseñó la mayor parte del mobiliario.

Peter Joseph Lenné se encargó del diseño de los terrenos, que anteriormente se habían dedicado a la agricultura. En las inmediaciones de la casa, creó un complejo de jardines que comienza con una rosaleda en el este bañada por la luz del sol de la mañana, culmina en la terraza de la casa al sol del mediodía y se adentra en la tarde y la noche con el Bosque de los Poetas y el Grupo de Ildefonso al oeste del palacio.

Conectó el parque recién creado con el antiguo Parque Sanssouci a través de un camino circular y amplias líneas de visión. El efecto de las elevaciones del terreno, los grupos de árboles y los árboles solitarios está cuidadosamente calculado. Incluso se creó una masa de agua artificial para completar el jardín paisajístico.